Ejercicio de sensibilización
Carla Chicango, 10mo de básica.
En la clase de proyecto hicimos una actividad que consistía en vendarnos los ojos y realizar distintos movimientos, caminar hacia algún lugar guiándonos por la voz del profesor Jorge Castillo, o caminar de la misma forma pero de forma grupal.
Fue un ejercicio interesante, ya que el estar acostumbrado a tener nuestros 5 sentidos algo como caminar es una actividad muy común y normal, pero de repente, no poder ver nada causa incluso miedo.
Al taparme la vista, lo primero que percibí es que mi cuerpo, ya que no podía ver, se concentraba en escuchar; me resaltaron especialmente los cantos de los pájaros o cualquier tipo de pequeño ruido al que antes no le habría prestado especial atención.
También, al seguir el ejercicio y caminar hacia la voz del profesor debo admitir que una sensación de miedo me invadió al caminar sin ese sentido que es tan importante para nosotros, tenía miedo de caerme o chocarme contra algo, que es algo que las personas no videntes probablemente sienten todos los días; pienso que son personas muy valientes, ya que siempre tienen un nuevo reto que asumir, vivir sin uno de nuestros sentidos más importantes debe ser muy difícil, y es por eso mismo que si en alguna situación nos topamos con alguien, debemos prestarle nuestra ayuda, porque de estar en su lugar también lo necesitaríamos.
En la clase de proyecto hicimos una actividad que consistía en vendarnos los ojos y realizar distintos movimientos, caminar hacia algún lugar guiándonos por la voz del profesor Jorge Castillo, o caminar de la misma forma pero de forma grupal.
Fue un ejercicio interesante, ya que el estar acostumbrado a tener nuestros 5 sentidos algo como caminar es una actividad muy común y normal, pero de repente, no poder ver nada causa incluso miedo.
Al taparme la vista, lo primero que percibí es que mi cuerpo, ya que no podía ver, se concentraba en escuchar; me resaltaron especialmente los cantos de los pájaros o cualquier tipo de pequeño ruido al que antes no le habría prestado especial atención.
También, al seguir el ejercicio y caminar hacia la voz del profesor debo admitir que una sensación de miedo me invadió al caminar sin ese sentido que es tan importante para nosotros, tenía miedo de caerme o chocarme contra algo, que es algo que las personas no videntes probablemente sienten todos los días; pienso que son personas muy valientes, ya que siempre tienen un nuevo reto que asumir, vivir sin uno de nuestros sentidos más importantes debe ser muy difícil, y es por eso mismo que si en alguna situación nos topamos con alguien, debemos prestarle nuestra ayuda, porque de estar en su lugar también lo necesitaríamos.
Comentarios
Publicar un comentario